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Los ambientes integrados son una excelente opción decorativa que a simple vista dan la sensación de que gozamos de un ambiente mucho más amplio cuando quizás lo único que separa a un espacio del otro es un simple mesón. Para algunas personas la integración de varios espacios en el diseño de interiores resulta súper complicada e incluso aterradora; y para la mayoría supone el planteamiento de diversas preguntas, como: ¿cuántos taburetes debo colocar en el mesón para ahorrar espacio? O ¿cómo puedo hacer para que los colores resalten en armonía entre un espacio y otro? Por eso en este libro te mostraré 6 simples y vanguardistas consejos para tomar las decisiones más asertivas al momento de integrar la cocina y el comedor, logrando que estos dos ambientes se complementen y que su unión sea lo más armoniosa y fresca posible. ¡Comencemos!
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Bien podrías elegir para cada uno de estos espacios un estilo único, pero por cuestión de economía sería mejor optar por elegir el mismo para ambos. Como es el caso de la imagen, en la que el estilo de la cocina se mantiene y se combina con el del comedor, mostrando un diseño a base de madera en ambos ambientes. Ahora, en el caso de que escojas un estilo único para cada ambiente debes estar muy pendiente de que no se pierda la armonía en el lugar y que ambos se contrasten bien para evitar que se vea reducido el espacio por los diferentes diseños incorporados.
Para comenzar con el diseño, te recomiendo que no tengas miedo de escoger colores vibrantes. Estudia todas las posibilidades de contraste e identifica las tonalidades que más te gustan para darle un estilo muy personal a tu decoración. ¡Tienes innumerables colores para escoger, no te quedes con los mismos que usa todo el mundo! Ten presente que es importante que esta nueva área se vea radiante, amplia, cómoda y acogedora a la vez. Puedes utilizar en ella colores como el rojo, el negro o el amarillo sin generar una atmósfera opresiva, para ello sólo debes crear un balance en la decoración. Inspírate en homify para identificar tu estilo favorito y crees unas combinaciones increíbles.
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La elección de los colores que predominarán en este espacio es fundamental para lograr una unificación uniforme, armoniosa y funcional. Es por ello que te recomiendo que juegues con los tonos claros; esto te dará mucha ventaja para resaltar la presencia de objetos y accesorios de colores intensos, también sirve para poder focalizar la atención en un solo punto en común. No puedo dejar de mencionarte que al usar tonos claros de fondo lograrás crear automáticamente un efecto de amplitud. Para ilustrar lo anterior, puedes observar la imagen. En ella el color blanco predomina la decoración y se combina con el resto de los detalles en madera, haciendo el lugar más cálido y ordenado.
Para integrar la cocina y con el comedor puedes optar por instalar un piso diferente en cada área o simplemente seleccionar uno para ambas. El escoger un piso distinto podría ayudarte a mostrar una clara separación en las funciones de cada estancia, que acompañado de un buen contraste armonizará la decoración dando la sensación de estar frente a un mismo ambiente. Es importante que, en cualquier caso, escojas un piso que sea fácil de mantener y limpiar ya que esto te ahorrará mucho tiempo y será un dolor de cabeza menos. También es importante que antes de escoger el piso de tu cocina-comedor te sientes a pensar detenidamente en el uso que le darás a cada área y consideres otros factores como la presencia de niños pequeños, mascotas un espacio estrecho, etc. En estos casos será preferible que deseches la idea de colocar el delicadísimo piso blanco de tus sueños porque es seguro que en algunas ocasiones (quizás muchas) tu cocina llegará a ser un verdadero desastre.
Como desventaja a la hora de combinar la cocina y el comedor está el hecho de que el humo y los olores a comida van a esparcirse más allá de la cocina, llegando a otros espacios como las habitaciones o incluso el baño. Pero, afortunadamente no existe problema sin solución, por ello la ampliación de una ventana y la colocación de una campana serán fundamentales para extraer el humo y aquellos olores invasivos que pudiesen esparcirse en los espacios y que incluso podrían llegar a impregnar tu ropa. En cualquier caso, al momento de cocinar es importante mantener abiertas todas las ventanas que existan cerca de este nuevo ambiente para que el aire circule libremente y así el olor a comida no se quede estancado.
Alguna vez te has preguntado, ¿dónde usar la luz blanca y donde colocar la luz amarilla? Pues la respuesta es muy simple, la luz blanca es mejor para los lugares donde se realizan tareas que requieren de mucho cuidado y atención; es decir donde realizas trabajos que impliquen la observación, escritura, lectura, etc. Por su parte, la luz más amarilla es ideal para aportar una mayor calidez en diversos espacios, tales como el comedor, la biblioteca, salas de estar, etc. Por ello, es recomendable que coloques una luz blanca en el área de la estufa (sobre las hornillas), en el área del fregador y del mesón donde se encuentran los utensilios de cocina y donde también picas los alimentos; mientras que puedes colocar en el resto del ambiente una luz más cálida, siendo esta reforzada con la luz de las ventanas.
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