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El techo de la vivienda es una de las partes más vulnerables de la construcción, es la zona que está más expuesta a la intemperie, a las condiciones climáticas, al sol directo, al viento, a las tormentas, y además debe protegernos de esas condiciones, debe proporcionar protección, calor, seguridad… ¡es el techo que nos resguarda!
Para asegurar las condiciones adecuadas en el interior de casa, es importante impermeabilizar y aislar el techo, esto es, asegurarse de que no permita la entrada de aire, de polvo ni de agua, además de mantener una temperatura agradable en el interior, dejando el calor o el frío, la lluvia y el viento afuera. Para lograrlo existen infinidad de materiales, desde decorativos hasta constructivos, y lo ideal es revestir el techo con un material que, además de proteger la estructura, luzca lindo y complemente el diseño de nuestra casa.
En este libro de ideas te mostramos 5 ideas para cubrir el techo y que, a su vez, éste te cubra con toda la seguridad que se necesita. ¡Acompáñanos y conócelas!
Comenzamos nuestra lista con lo más conocido, la teja tradicional. Se trata de una pieza curva y larga, de barro cocido, que se coloca traslapando una pieza sobre otra de tal modo que las dos quedan encontradas, y a su vez se conectan con las piezas alrededor. Este especial acomodo a la hora de instalarlas, permite un aislamiento absoluto al techo, pues el agua que pueda penetrar tras recorrer la curva de una teja, cae definitivamente a la teja de abajo, la cual, debido a que se encuentra de cabeza
, guiará el agua hacia el extremo del techo gracias a su forma y a la pendiente de la estructura.
Esta teja, también de barro cocido, tiene otra característica, no requiere de las piezas invertidas debajo de las tejas mismas para encauzar las aguas a lo largo de la pendiente, sino que se traslapan sólo las piezas superiores linealmente y de forma ascendente sobre la estructura. Cada pieza cuenta con la parte curva, la cual guía el agua hacia sus extremos, en donde la pieza se alarga en una placa lisa y plana, recostando una sobre otra.
La ventaja que tiene sobre la anterior es que se utiliza mucho menos material y la estructura luce más limpia y menos sobrecargada.
Este tipo de teja consiste en una pieza plana con gruesas líneas rectas en la superficie, para guiar las aguas sin correr el riesgo de que escurran hacia los costados, como pequeñas canaletas. Las piezas son prácticamente cuadradas, gruesas y en tonos terracotas, marrones y chocolatosos.
La vista que generan es mucho más uniforme que las tejas tradicional y renacimiento, el estilo luce más geométrico y moderno, pero mantiene la misma funcionalidad que las piezas anteriores. Hay mayor libertad para crear diseños, organizar las piezas en líneas rectas o en traslapes diagonales.
Se trata de una teja plana, delgada y rayada, con múltiples y delgadas líneas rectas verticales para encauzar el agua.
Es mucho más ligera que las anteriores, luce moderna, se adapta a estilos contemporáneos y cuenta con una mayor gama de tonalidades, desde los tradicionales marrones hasta verdes, tonos oxidados, negros e imitación madera.
Por último, este tipo de teja simula ser una pieza de madera, como una pequeña corteza de árbol protegiendo el hogar. Se trata de piezas totalmente planas con un acabado curvo en la punta, es esmaltada en colores sólidos y homogéneos y la parte superior, la única que se esmalta, es vitrificada, lo que la hace sumamente resistente a la intemperie y absolutamente impermeable. Una buena opción, diferente y colorida.
Estas piezas y algunos estilos más de tejas se pueden encontrar con los expertos de Enfoque Constructivo, en el Estado de México. Y si quieres más ideas para los interiores de tu casa, aquí encontrarás 15 fabulosas ideas para iluminar las paredes interiores de tu hogar.
